sábado, 30 de noviembre de 2013

La sonrisa tatuada

No creo en la reencarnación.
Sí creo en la bondad de la gente.
Pero me resulta más tangible su indiferencia.
No es que no encuentre personas con las que compartir cariño, pero a veces me resulta tan sórdido ver cómo hay personas tan... vacías en el mundo. ¿Por qué es que a veces estamos tan vacíos?
Y si no estamos vacíos, la mayoría de las veces estamos llenos de dolor.

No sé si la angustia me hace entender las cosas mejor.
Pero sé que los que se la guardan y la intentan olvidar no entienden nunca nada.

Me frustran esas personas.
Me cansa mirarlas, no entiendo de qué van ni cómo funcionan. Y eso significa que no entiendo a la mayoría de la gente.
Tengo tantos por qués para ellos... Y sus respuestas nunca me van a satisfacer.